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Fortaleza de probable origen islámico. En los últimos años se ha procedido a unas excavaciones arqueológicas en todas las inmediaciones, que seguirán en un futuro y, gracias a las cuales podemos tener, hoy en día, una idea muy aproximada de cómo sería la edificación.
El origen de esta fortaleza está relacionado con la tribu islámica bereber de los Zuwaga que, desde el Norte de África, se diseminaron por la geografía peninsular. Su ubicación elevada y rocosa le otorgó posteriormente el nombre de Miramontes.
A mediados del siglo XII, el geógrafo Al-Idrisi, confeccionó un itinerario de Córdoba a Badajoz, incluyendo el Castillo de Miramontes como zona segura dentro de este recorrido.
Tenemos constancia de la elaboración de un documento, en 1295, por el que el Castillo de Azuaga queda ligado a la Orden de Santiago y otro, en 1331, que hace referencia a la obligación que tiene el comendador de mantenerlo en buen estado y en él se alude expresamente a la existencia de una “torre en el recinto”.
De forma paralela, la fortaleza perdió la función de residencia del comendador y comenzó a descuidarse más.
En los últimos años se han llevado a cabo por, un Taller de Empleo y una Escuela Taller, excavaciones con las que podemos hacernos una idea bastante aproximada de cómo era el castillo.
Se descubrieron:
- Aljibe y calzada romana.
- Cerámicas, vasijas y monedas.
- Sillares romanos.
- Clavos de puertas…
